miércoles, 27 de junio de 2012

Declaración del FIS sobre la elección presidencial del primero de julio

El Frente de Izquierda Socialista (FIS) declara que la jornada del 1° de julio para elegir al presidente de la República para el periodo 2012-2018 es antidemocrática y viciada de origen por la manipulación que desde hace años se realiza a favor de Enrique Peña Nieto en contubernio con la principal televisora del país, Televisa, y ante la complacencia e indiferencia del IFE, institución corrupta en absoluto controlada por los ciudadanos independientes y que sirve a los intereses partidarios, principalmente del PRI.

Esta jornada electoral en la que además se elegirán a representantes del poder legislativo así como de miles de cargos locales se realizará en medio de la incertidumbre de millones de mexicanos y mexicanas, porque se ha perdido completamente la credibilidad en las encuestas, los medios viven un descrédito enorme y es evidente que la competencia entre Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador se ha cerrado y que la noche del primero de julio no hay seguridad sobre lo que pueda suceder.
Pero es indiscutible y por eso la zozobra de tanta gente, que Leonardo Valdez, presidente del consejo general del IFE, puede declarar virtual ganador de la elección a Enrique Peña Nieto.

Para muchos este resultado será la culminación de un elaborado fraude que se viene realizando desde hace meses incluso años de antelación. Nosotros, socialistas revolucionarios denunciamos esta gran operación de engaño y timo al pueblo de México realizada por la llamada “clase política” y sus partidos “registrados”. No tenemos confianza alguna en el IFE, mal llamado “árbitro electoral”, y por eso no nos sorprenderá que se conozcan hechos que eran tan comunes en la época del esplendor priísta: las “urnas embarazadas”, los “ratones locos”, la votación de los muertos… sabemos que los propios capacitadores del IFE ya trabajaron en preparar esa manipulación directa de la votación y que en miles de casillas los priístas tendrán manga ancha para ajustar la votación a sus intereses.

Pero lo más importante, es que el proceso electoral en su conjunto es un verdadero fraude, porque es mentira que la genuina voluntad ciudadana se expresará en las urnas, porque la antidemocracia ha sido la regla en las operaciones que han regido los procedimientos electorales, desde la prohibición de candidaturas independientes hasta la imposición de requisitos absurdos para el “registro” de nuevos partidos. La “democracia” que determina estas elecciones es la “democracia del dinero”, de la corrupción y el cinismo de una casta de políticos que sirven a los verdaderos amos de México: los grandes empresarios industriales, financieros, comerciales, de los medios de comunicación de masas, nacionales y extranjeros.

Millones de votos serán comprados, descaradamente inducidos, fabricados con base en mentiras y manipulaciones de los poderosos creadores de “opinión pública”. Esta democracia es la democracia de los ricos, en la que los más poderosos tienen amplios márgenes para imponer su voluntad.
Peña Nieto puede ser declarado presidente de México, como resultado de ese fraude, y por supuesto, no aceptaremos que de esa forma se haya expresado la voluntad popular.

Por eso, declaramos nuestro total respaldo a la decisión de los jóvenes del #Yo Soy132 que se han movilizado multitudinariamente en el país y se proponen ocupar plazas públicas desde la noche del primero de julio y proseguir aún después de las elecciones con las movilizaciones que se han iniciado con el objetivo de conseguir la democratización real del país y, si fuera el caso, seguir enfrentando con la lucha callejera a Peña Nieto y los poderes fácticos, es decir, los grandes capitales, el crimen de cuello blanco, la jerarquía católica y demás oligarquías en México.

El gran hecho ocurrido en medio de la campaña electoral, que se desarrollaba en medio del desánimo y hasta la indiferencia, fue el surgimiento de la acción política multitudinaria de los jóvenes identificados en el movimiento #YoSoy132, que literalmente fue una sacudida al tablero político. Hoy podemos decir, que el triunfo de Peña Nieto, el cual parecía irrebatible, hoy ya no contará con legitimidad alguna.

Esos jóvenes, han retomado algunas de las mejores experiencias del movimiento social democrático; por eso reivindicamos la organización desde la base, en asambleas democráticas, que eligen representantes rotativos y removibles, que conforman comisiones de trabajo y que han aportado una gran imaginación y creatividad para la lucha.

Una gran cantidad de participantes, ha hecho otro aporte fundamental a la lucha, que es la desconfianza a los políticos, los candidatos y sus partidos, inclusive aquellos que se dicen de izquierda y que a pesar de las evidencias palpables del fraude electoral que ya existen, se comprometen a respetar el resultado, y la presión es enorme para que no ocurran movilizaciones poselectorales.

Los socialistas revolucionarios no tenemos confianza en los candidatos, no esperamos de ellos una convocatoria para seguir en la lucha. En cambio, apostamos al empuje de la lucha estudiantil y de las organizaciones que han anunciado que no se quedarán cruzadas de brazos. Nosotros tampoco.
En la eventualidad posible de un escenario en el que se declare ganador a López Obrador, aún en él consideramos que no debe cesar la movilización y que las banderas democráticas que se levantan no deben dejarse de lado y será necesario mantener la lucha para que se cumplan esas reivindicaciones fundamentales.
Sea quien sea el candidato o candidata que resulte victorioso o victoriosa el 1° de julio, los amos de México tienen una agenda que le impondrán a  cualquiera de ellos, la agenda de las reformas “estructurales” de la tercera generación para empobrecer más a nuestro pueblo, para imponer más privatizaciones (en especial la de PEMEX), para exprimir más y mejor la fuerza de trabajo de los obreros, campesinos, profesores, para entregar más la economía nacional al capital extranjero, para desmantelar aún más la seguridad social solidaria, para imponer más leyes represivas y darle a la policía y a los militares más recursos para sus tareas de intimidación y muerte. Los socialistas revolucionarios llamamos a activistas, sindicalistas, estudiantes y a todos aquellos y aquellas que luchan por un nuevo, independiente y democrático México en no cejar en nuestra lucha y organizarnos mejor a partir de hoy.

Llamamos al pueblo trabajador, a los jóvenes, a las mujeres trabajadoras, a las profesionistas, a no dejar pasar más tiempo y seguir la lucha, antes durante y después de las elecciones. Y no decimos tener la verdad absoluta, sino que pensamos en la discusión democrática, en la reflexión colectiva para decidir las mejores estrategias para continuar con la movilización.

Por eso hemos decidido impulsar la realización del Foro “Después de las elecciones, ¿qué hacer?” el próximo sábado 7 de julio para que junto a todos los mexicanos y mexicanas dispuestos a seguir la lucha por un verdadero país democrático, independiente y solidario discutamos y lleguemos a resoluciones para lograr ese objetivo en los días, semanas y tiempos cruciales que se anuncian aquí en nuestro país y las luchas de los pueblos que hoy se dan en todo el mundo.

FRENTE DE IZQUIERDA SOCIALISTA (FIS)

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